La verdad es que no resulta nada entretenido que los ensayos de la cuadrilla de la Virgen de las Angustias, Patrona de Ayamonte, no puedan salir a la calle y tengan que realizarse dentro de las naves de la Parroquia.
Pero lo cierto es que el pasado viernes, tras empezar el ensayo allá donde está el retablo de San Diego de Alcalá, no esperaba vivir una sensación tal como la que, una vez dábamos la vuelta en donde se encuentra la Virgen de Fátima me encontré con Él, allí, en la soledad de su capilla inmerso en la impresión de aquel templete hecho únicamente para Él.
Así pues, hasta en dos ocasiones recorrió la cuadrilla comandada por Juanma el tramo de Fátima a Excombatientes. Unos metros multiplicados en los que, a través de la rejilla que bordea la parihuela, pude encontrarme a un Pasión distinto, envuelto en la penumbra con una iluminación que nos presentaba a toda la primera una estampa, como bien dijo mi compañero Jaime, impresionante. En esa trabajadera, éramos sólo dos de Excombatientes, pero seguro que todos, en el silencio de su trabajo, posaron sus ojos sobre Él y se estremecieron casi tanto como nosotros.
En breve, cuando tu genial baldaquino se quede sin tu presencia debido a tu necesaria restauración, un gran vacío inundará la Parroquia de las Angustias.
Seremos muchos los que echemos de menos la impresión de, una vez llegado al altar mayor, girar a la derecha y encontrarte allí, como siempre, despertando todos esos sentimientos a los que una imagen puede llegar.
Un Saludo
P.D: Foto de elsobrinodelastrucci.
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