La Hermandad del Orgullo Gay


Antonio Rodrigo Torrijos ha tenido la mala fortuna en su vida de ser sevillano, o bien Sevilla ha tenido la mala fortuna de dar cobijo a Torrijos.

Vaya por delante de toda esta exposición mi total respeto a la condición sexual que cada uno elija, preferiblemente llevada a cabo de manera coherente y formal.


Resulta que este Torrijos, al que se le ocurrió llamar a la Navidad como Fiestas del solsticio de Invierno, se define a sí mismo cuando compara la cabalgata del Orgullo Gay que tuvo lugar el pasado domingo con las cofradías de Semana Santa. Ojo, de Sevilla.


Pues eso, que a Torrijos parece que si le hubieran dejado elegir no hubiera elegido esta ciudad para desarrollar sus demagógicas acciones políticas. O quizás sí, pues no es descartable en ningún momento que la provocación a la realidad de cientos de miles de sus paisanos sea su razón de ser.


Será quizás porque pasaron por la Avenida y llegaron a la Catedral, en un extraño itinerario para una celebración de este tipo que, seguramente, no tendrá nada que ver con la provocación y falta de respeto de la que últimamente hacen gala todos estos fundamentalistas anticristianos. Será simplemente por la falta de información, cultura o conocimiento de la historia de una ciudad que desde 1340, y no desde este mismo 2009, corre de forma paralela a la de unas instituciones que en el Siglo XXI le dan razón de ser.


Aunque seguro que será por la anteriormente nombrada falta de respeto de la que cada vez hacen más gala aquellos que viven por y para la libertad, "su" libertad, obviando que somos muchos, millones los españoles, incluidos homosexuales, que nos consideramos cristianos y cientos de miles los sevillanos que cuentan los días y sus vidas para la llegada de la internacionalmente conocida Semana Santa de Sevilla.


Dicen que no más de 5.000 formaron parte de la cabalgata del sábado. Sólo con la Macarena y el Gran Poder suman los mismos "manifestantes". Una cabalgata que, por cierto, deja bastante que desear en cuanto al ideal igualitario que proponen y de las que colectivos como Colega, quizás el más importante que aglutina a homosexuales, se ha desmarcado.

Si quereis ser iguales no necesitais manifestaros por las calles para promulgarlo, mientras sigais haciendo cosas similares nunca lo sereis, mientras vosotros mismos os tacheis como diferentes.


Un Saludo

P.D: Imagen tomada del blog
www.canalsu.blogspot.com

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